“Mientras la virtud no sea recompensada ya sobre la Tierra, en vano se predicara la ética.” El malestar en la cultura S. Freud.
Los integrantes de la Comisión de DDHH del Colegio de Psicólogos de Tucumán quieren hacer pública su preocupación ante la aparición de situaciones de estigmatización a personas con síntomas de COVID 19, a pacientes confirmados, y al personal del área de salud en general, como médicos, enfermeros, personal de servicio, etc.
La situación de fragilidad que nos genera la presencia de la pandemia, la cual configura un enemigo invisible que puede estar en cualquiera, moviliza en los sujetos la angustia. Esto se agrava en las culturas que potencian el individualismo narcisista, en esas sociedades el ser humano vive aislado afectivamente de los otros.
Este escenario de vulnerabilidad nos muestra también la necesidad de una política de cuidado de todos los sujetos, en tanto sujetos de derechos, y nos lleva a interpelarnos sobre la forma en la que pensamos la salud, sin dejar de evocar lo que enuncia nuestra Ley de Salud Mental vigente, la cual nos habla de la salud mental como un proceso multi determinado, cuya preservación y mejoramiento implica una dinámica de construcción social vinculada a la concreción de los Derechos Humanos y sociales de toda persona
Convocamos a la sociedad a preservar y fortalecer los lazos solidarios entre los miembros de la comunidad. La marca estigmatizante sobre pacientes y trabajadores de la salud no hace más que repetir mecanismos y estrategias de disciplinamiento como las que enunciaba Foucault.
La violencia en el discurso de algunas personas, incluso funcionarios, la carencia de una actitud empática imposibilitada en el individualismo y el egoísmo, producen fractura en el lazo social y se traduce en ataques a vecinos por pertenecer al área de la salud, ataques a la propiedad, trato diferenciado a quienes padecieron la enfermedad, entre otras situaciones que son noticias todos los días.
Ante este panorama hacemos un llamado a los medios de comunicación y sobre todo a aquellos que ejercen la función pública, a superar estas actitudes que, por suerte, son minoritarias y contrastan con otras acciones colectivas que apuestan al lazo social amoroso. Lo que muestra en nuestra sociedad la conciencia de que la salida será colectiva y que las dificultades que deberemos afrontar serán mayores si no contribuimos a generar empatía con nuestros trabajadores de la salud y con los sujetos afectados por el virus.
Celebramos y reivindicamos a nuestros colegas dispuestos a acompañar a quienes lo necesiten, a todos los trabajadores que ponen el cuerpo día a día en este contexto, a los vecinos que aplauden cada noche, a nuestros artistas que difunden sus expresiones de distinta formas convocando juntos y entre todos a preservar los lazos solidarios .
